Cuando una empresa adquiere o se une a otra, surge la necesidad de crear una nueva composición en la estructura corporativa, al fin y al cabo, estamos hablando de organizaciones que ahora cuentan con nuevos accionistas y una gestión que inevitablemente necesitará pasar por reformulaciones.
Además de las fusiones y adquisiciones, la reorganización societaria en las empresas también se produce por otros motivos y con distintos fines estratégicos. Continúe leyendo el artículo y descubra más.
¿Qué es una reorganización corporativa?
Conceptualmente, la reorganización societaria supone un ajuste de la estructura accionarial de la empresa y es un procedimiento muy común en el mercado empresarial, especialmente si tenemos en cuenta la constante necesidad de adaptación que deben sufrir las empresas.
Es prácticamente imposible que el modelo de empresa elegido al abrir un negocio perdure durante toda su operación, ya sea por razones estratégicas, fiscales, entrada de nuevos socios o aspectos de fortalecimiento del mercado.
Pero la reorganización corporativa no está relacionada sólo con un cambio en los accionistas que detentan el control. También se refiere a cambios en el régimen societario elegido, como la migración de Sociedad Anónima a Sociedad Anónima, por ejemplo.
¿Cuáles son los principales motivos que llevan a una reorganización empresarial?
Todos y cada uno de los procesos de reestructuración en una empresa requieren planificación, consideración y asertividad. Cuando hablamos de reorganización empresarial no es diferente: independientemente del motivo que la motive, es importante saber el momento adecuado y seguir todos los pasos de forma ordenada.
Una de las situaciones en las que se considera esta reformulación está vinculada acuestiones fiscales,cuando la organización descubre que modificar el régimen tributario puede generar ahorros reales en el pago de impuestos.
En otros casos, la reorganización corporativa se convierte en una posibilidad cuando dos empresas se unen en busca de mejorar la eficiencia operativa, asegurar una mayor ventaja competitiva, ampliar el poder de mercado y diversificar las fuentes de ingresos.
Durante el funcionamiento de una empresa, también es común que existan cambios en la membresía, lo que, en sí mismo, exige también reconfiguraciones para adecuar el tipo societario, teniendo en cuenta a los accionistas que se incorporan o terminan su vinculación con el negocio.
¿Cuántos tipos de reorganización empresarial existen?
Como se ha observado hasta el momento, existen varios motivos que llevan a una reestructuración corporativa, por lo tanto, existe más de una forma para que esta se dé en una empresa.
Esta reorganización se puede realizar a través de una fusión o adquisición,cuando las empresas involucradas en la operación de fusión y adquisición cesen sus actividades y formen un nuevo CNPJ.
En este tipo de situaciones, la nueva estructura corporativa se convierte en propietaria de los activos y también de los pasivos de las organizaciones que participan en la transacción. Es fundamental que el rediseño de la composición accionaria cumpla con los requisitos legales y se presente para la aprobación de los órganos reguladores correspondientes.
Otra modalidad se da cuando hay un cambio en el modelo corporativo de una empresa, a la que llamamos Transformación.A pesar de esta modificación, los bienes y socios se mantienen sin cambios.
Cuando una empresa realiza una transacción total o parcial de su patrimonio a otra, tenemos un ejemplo clásico de otra forma de realización corporativa:dividir.
También existe un formato cuyo nombre lo dice todo: el incorporación.En este caso se produce una absorción completa de una sociedad por otra, con la extinción de la entidad que se constituyó y la agregación de bienes y activos.
Reorganización corporativa en fusiones y adquisiciones: buscar los socios adecuados.
Las operaciones de fusiones y adquisiciones son complejas y requieren un seguimiento detallado en cada etapa, desde la búsqueda de las mejores oportunidades hasta el proceso de integración posterior a la adquisición, cuando es necesaria una reorganización corporativa.
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